Al ritmo del corazón
Todo trabajo con emociones pasa irremediablemente por el gran catalizador y transformador de estas que no es otro que el corazón. Cualquier trabajo que hagamos para liberar la rabia , la tristeza , el odio o cualquier emoción intensa que nos gobierna y nos controla en momentos determinados, ha de pasar por el filtro del corazón para consolidarse. La renovación y liberación de las ataduras que conectan nuestro corazón con vivencias y experiencias, que quizás en su momento quedaron inconclusas , sin resolver, o bien fijadas en forma de intensa carga emocional , es un proceso alquímico en nuestro camino de crecimiento y evolución personal.
Muchas veces es difícil poder explicar que es lo que ha pasado después de una sesión de psicoterapia en la que se ha tocado y comprendido algo nuclear en nuestro universo emocional . El hecho de saber con seguridad que algo se ha soltado , que algo se ha ido , es una experiencia sentida que solo la persona sabe que es así . Con palabras es muy difícil de poder matizar que es lo que ha pasado, dado que el lenguaje , todo y su riqueza , es limitado a la hora de expresar sensaciones que te conectan con tu ser más profundo.
La vibración energética y emocional que nos puede permitir ,en un momento determinado, poder avanzar en nuestro desarrollo personal, surge cuando uno menos se lo espera. Muchas veces se desea llegar a una meta concreta en la que uno piensa que por fin algo pendiente estará ya resuelto. El que hace este trabajo de proyección a un futuro satisfactorio es el mental pero a menudo no está trabajando en coordinación con el físico y el emocional cuando elabora estas ideas.
El auténtico trabajo en profundidad se da cuando se produce la conexión del emocional con el mental y el físico y esa sintonía facilita el reconocimiento de lo que estaba estancado o disgregado en nuestra conciencia. La resintonía de estos tres campos de información es lo que establece finalmente la integración de aquello con lo que hemos trabajado y que quizás no era para nosotros algo primordial antes de iniciar la sesión.
Es por ello que , por una parte, siempre es bueno establecer metas y crear proyectos con plazos de cumplimiento . Por otra parte, es igualmente necesario podernos permitir expresar y resentir aquello que en muchas ocasiones intentamos evitar o posponer . Son aspectos de algo que sabemos que está allí pero no apetece volver a retomarlo por su carga emocional y por todo lo que hemos podido asociar a esa experiencia en concreto o a varias de ellas en una misma sintonía.
Quizás una de las terapias que te permite darte este espacio y dejar que tu inconsciente se abra para poder sanar aspectos de tu interior es la terapia regresiva. Esta, de forma totalmente natural ,deja que al ritmo de tu conciencia y de tu corazón más profundo e íntimo , las cosas surjan y se expresen cuando realmente estas preparado para por fin comprenderlas , integrarlas y asumirlas.
Y el resultado siempre tiene un reflejo fuera que lo podemos vivir con claridad y , sin lugar a dudas , reconocer y experimentar de forma muy transparente ,lo que supone la conexión del trabajo interior con la realidad exterior.
Oscar